Director: Angela Bassett
EEUU
2015
Sinopsis (Página Oficial):
La ganadora del Globo de Oro® y nominada al Oscar Angela Bassett hace su debut como directora con la película de Lifetime “Whitney”, con Yaya DaCosta en el papel principal y con Arlen Escarpeta junto a ella como Bobby Brown. “Whitney” narra la relación repleta de titulares y decisiones entre la cantante —actriz, productora y modelo—Whitney Houston y el emblemático compositor Bobby Brown, desde la primera vez que llegaron a la cúspide de su fama a su tumultuosa relación y boda. A lo largo de todo lo que vivieron juntos, la pareja de superestrellas siguieron unidos con dificultades mientras trataban de lidiar con las recompensas y consecuencias de la fama y la fortuna creada por el meteórico ascenso de Houston que pronto eclipsará a ambos.
El telefilme de Lifetime pudiera sintentizarse en sus planos finales, con la reconciliación de Bobby Brown y Whitney Houston fundidos en un abrazo mientras que esa caja de madera donde la cantante guardaba su droga seguía presente en la composición del plano. “Whitney” decide cerrar con una actuación de su mítica versión de ‘I Will Always Love You’ resumiendo la relación entre la pareja con Brown entre bastidores. Ella fue la estrella y él acabo siendo víctima de su fulgor. Esa concepción y estrategia pudiera sorprender respecto al imaginario de la propia audiencia debido a todo el noticiario sensacionalistas de sucesos acerca del que fue matrimonio. No esperen, por lo tanto, una película para televisión repleta de violencia doméstica y clínicas de desintoxicación porque la visión de los guionistas ha sido confeccionar una cinta romántica sobre la fama y sus reversos. Lo de Whitney y Bobby fue amor a primera vista. Él trató de hacerse el duro… pero la dura fue siempre ella, incapaz de confiar fácilmente en otro ser humano por problemas de confiaba en su adolescencia. Whitney toma toda clase de drogas y Bobby era el blando, siendo una crisis artística personal al quedar completamente eclipsado, el detonante de su caída en espiral hacia las mujeres y las drogas.
Se trata de un biopic tradicional que nos desvela que el material con el que podían trabajar los guionistas se trataba de una telenovela a la que tampoco se molestan demasiado en incorporar una parcela musical atrayente más allá de la propia mención y recreación de los hits de Whitney Houston. Lejos de ese concepto de ‘bigger tan life’ impuesto en las oscarizadas “Ray”, “En la cuerda floja” o “La vida en rosa”… y en todo ese manual de biografias musicales llevadas sobre todo a la gran pantalla. Tampoco es que se le pidiese al telefilm de Lifetime la experimentación de Todd Haynes en “I'm Not There” ni la marca HBO “Bessie” pero no productos con malas críticas, como “Aaliyah: The Princess of R&B”, respecto a las estrellas de la música negra fallecidas en el presente siglo.
Podíamos esperar algo mejor dl debut de Angela Basset a la dirección. Ambas coincidieron en “Esperando un respiro” y la actriz también estuvo en la piel de Tina Turner e incluso fue nominada al Oscar a tal efecto. “Whitney” se ciñe al encuentro entre la pareja protagonista, su romance, algunos problemas y conflictos para poder desatar su amor y finalmente casarse, así como desvelar el nacimiento de Bobbi Kristina Brown siendo el detonante de una futura crisis en la pareja. El estudio no quería que la cantante eludiera una gira debido a su actual y mastodóntico éxito y Bobby se convirtió en la perfecta moneda de cambio, sacrificando su carrera en el proceso y dejando sola a su esposa y provocando su caída hacia las malas compañías y drogas. El telefilm no ha convencido en absoluto a los familiares de Whitney Houston y puede que tampoco a sus fans. No es que Basset sea la responsable directa, queriendo imponer cierta autoralidad en ese juego de montaje, peinados y vestuarios para comprimir su ‘The Bodyguard World Tour’. Pero realmente el problema de “Whitney” es su incapacidad para concretar un posicionamiento con sus personajes: no quiere demonizarlos pero tampoco se atreve a maquillar completamente sus conflictos y adicciones. Simplemente nos queda claro que ambos se amaban mucho y que Houston siempre amaría a ese hombre al que también tendría que perdonar.
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