Eye Candy: ¡Qué bonito es ser una preciosa (y traumatizada / stalkeada) hacker!

Serie de TV

“Eye Candy”

EEUU

2015

Sinopsis (Página Oficial):

“Eye Candy” se centra en una genio de la tecnología llamada Lindy, quien es persuadida por su compañera de piso para comenzar con citas en línea y comienza a sospechar que uno de sus misteriosos pretendientes podría ser un acosador cibernético mortal. Cuando sus amigos y un escurridizo ciber-policía de encubierto descubren a un asesino en serie en Manhattan, todas las señales apuntan a una de las citas de Lindy. Al trabajar en equipo con esta banda de piratas informáticos, Lindy trabaja para resolver los asesinatos mientras que desatar su propio estilo de la justicia en las calles de la ciudad de Nueva York.

Crítica Bastarda:

¿Por dónde empezar a narrar semejante despropósito televisivo cuyo código fuente ya es el el peor virus posible? ¿Cómo podemos asimilar una propuesta capaz de infectar tanto a cualquier atisbo de calidad como de las neuronas del público? Simplifiquemos que el gran mérito de “Eye Candy” es seguir los pasos esquemáticos del último éxito de MTV: “Finding Carter”. Todo lo positivo que pudiera tener desmarcarse de un procedimental, se pierde en un show que debería figurar dentro de una televisión alienígena de “Rick y Morty”. Recapitulemos, nos encontramos ante un slasher clásico (con envoltorio contemporáneo) con un asesino en serie obsesionado con la protagonista de la serie. Ella es hacker y está traumatizada desde que secuestraron a su hermana delante de sus narices de la manera más tróspida, estúpida, inverosímil y chapucera posible. Ver para creer, oigan. AVISO: ustedes también quedarán traumatizados si son testigos. Ha pasado el tiempo y nuestra protagonista se dedica a ejercer como vigilante mientras tantea con un policía buenorro y también con otro lozano que se dedican a crímenes cibernéticos. Y, claro, ahí está ella… marcando tipo, pose y perfecto maquillaje y belleza. ¿Y dónde está el trauma? ¿¡Dónde!?

Se supone que una hacker tendría que ser una tipa inteligente y asocial siguiendo el estereotipo impuesto por Lisbeth Salander en la fisonomía de la ficción contemporánea. No, “Eye Candy” es el nombre del homónimo nick que encarna detrás de la pantalla Lindy en una red social muy popular para citas que utiliza un asesino en serie... al ser monguers todos sus usuarios (nivel MYHYV). Ella es muy sociable y es tonta. Sí, es tonta. Tonta, tonta e infinitas veces tonta. No obstante, un inteligente y maléfico psycho-killer queda obsesionado en su encuentro… y, como tuvo varios pretendientes, ella desconoce su identidad. Lindy es una hacker tan inútil que el asesino hackea su ordenador y la espía por su web-cam. ¿Y tú te haces llamar pirata informática? En este punto, imagínense todos los clichés del género y policías descamisados sin mucho sentido. Todos son guapos y uno de ellos tiene el romance de rigor con la protagonista. También hay un gay y una amiga afroamericana (pero más mulata para no desentonar en los wallpapers de la cadena). Y, por supuesto, el ingrediente secreto de la receta son pocas neuronas. El asesino en serie no dudará en utilizar todos los mind-games para llevar a la heroína a enfrentarse con sus más dolorosos traumas… y de la manera más estúpida posible, claro.

Piense en todos los peores diálogos y en las más infectas secuencias prototipo de un slasher adolecente. Mézclelas en un piloto… y llore. De la risa. La primera secuencia es lo más original, que conste. “Eye Candy” únicamente puede ser entendida como una comedia de humor absurdo completamente vacía y carente de emociones salvo la vergüenza ajena. Es MTV, ¿qué esperábamos? ¿El equivalente a “Finding Carter” o “La chica invisible” al género de suspense y terror adolescente? Puede que se la vendan como un cruce de “Pretty Little Liars” y “Teen Wolf” e incluso la comparen en lo bueno y lo malo con el videojuego “Watch Dogs”, aunque el avance para la temporada nos revela la absoluta inverosimilitud y encadenamiento de absurdos. ¿Y la moraleja? No importa que te acose un asesino en serie mientras sea atractivo y esté tan caliente como tú. “Eye Candy” quiere atraer a una audiencia concreta aunque la sensación sea de encontrarnos ante un experimento ante la venidera “Scream” en formato televisivo en la misma cadena. Sus líneas de diseño son tan obvias e incluso cursis para el subgénero que cualquier persona inteligente no se acercaría a Lindy. Ella es la gafe y auténtica asesina… y sus neuronas están en peligro. No busque venganza aquí, no merece la pena nada salvo su suicidio neuronal. 

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