Páginas Bastardas

viernes, 4 de abril de 2014

The Americans (2x06) Behind the Red Door: Consolidando la segunda temporada de la serie

Resulta triste que “The Americans” no esté contando con el apoyo de la audiencia en su segunda temporada. El drama de espías rusos en suelo americano durante los 80 en plena Guerra Fría tiene rendida a la crítica estadounidense pero le falta ese factor determinante llamado público. Sin espectadores fijos y fieles es tarea imposible consolidar una serie de gran alcance aunque no parece su caso sino que, al igual que otra ficción amada y brillante por la prensa especializada y los seriéfilos como Hannibal, no encaja del todo ni en los moldes de la cadena y la noche/horaria encuadrada en la parrilla. En el caso de “The Americans” da la impresión más de lo segundo que de lo primero porque FX parece confiar en la ficción pero es difícil que la serie que protagonizan Keri Russell y Matthew Rhys pueda sorprender dentro de los márgenes impuestos. Tiene, por el contrario, un público (algo mínimo para aquello que se espera de ella) que la respalda y es momento de repasar “Behind the Red Door”, sexto capítulo de su segunda temporada. 

Nos encontramos prácticamente a la mitad de la entrega y “The Americans” quiere bascular entre la intriga y tensión psicológica y el avance dramático de todos personajes inmersos en peligrosas tramas. Resumamos el asunto en que junto a la vuelta de Claudia (Margo Martindale) tenemos tres personajes que van a ser las puntas de ese creciente conflicto entre la vida personal (y familiar) de los protagonistas. Y no hablo sólo de los Jennings sino de Stan y su relación romántica con Nina, femme fatale por excelencia. La tapadera de Elizabeth y Phillip pudiera quedar expuesta tras la muerte de Emmett y Leanne, nos hemos olvidado de las pesquisas de Paige que reduce su cuota en pantalla (y su hermano Henry desaparece, por ejemplo en este capítulo) y vamos a centrarnos tanto en su acercamiento a Andrew Larrick (Lee Tergesen), como sospechoso del asesinato del otro matrimonio de espías pertenecientes al Directorio ‘S’, para caer dentro de uno de los secretos de la serie: la inamovible y perfecta peluca de Clark, jugando así con la vertiente psicológica dramática de los Jennings frente al matrimonio de uno de los roles (y personajes caricaturizados) de Phillip casado con la secretaria del FBI Martha.


Que nadie piense que Joseph Weisberg no se ha documentado o conoce algo del asunto por su vinculación con la CIA y en “Behind the Red Door” veremos qué sujeta la peluca a la cabeza de Matthew Rhys. Da la impresión de que la serie quiere, pese a sus licencias y evidentes desafíos racionales, ser lo más realista dentro de sus credenciales y universo y vamos a tener más de esa joven espía de Nicaragua ligada a un drogadicto ayudante de un congresista mientras conoceremos más del joven remplazo de Claudia, Kate (Wrenn Schmidt), y las intenciones de Oleg Burov (Costa Ronin) en su plan para posicionar a Stan por su vinculación emocional con Nina y conseguir así el acceso a los registros del FBI. Digamos que ese otro juego de despachos permuta lo ofrecido en la anterior temporada, ya que permite que las tramas de la Rezidentura y las propiciadas por los despachos del Buró Federal de Investigación dejen más espacio a Elizabeth y Phillip para sus planes en paralelo. Con la relación estabilizada del matrimonio esta temporada vamos a tener otros planteamientos algo más retorcidos sobre sentimientos a flor de piel en esos juegos de roles, pelucas y metáforas como ese plano cenital de una expuesta Elizabeth sesgado por un ventilador de techo. ¿Sus mentiras les han convertido en seres difuminados y borrosos así como su moral? ¿O sus traumas pasados, como la violación por su oficial de entrenamiento, queda en evidencia ante ese ‘animal salvaje’ de Clark? Nos interesa conocer a Frank Gaad de puertas adentro de su casa para revelarnos a la persona y a su mujer ¿vietnamita?, potenciando el distanciamiento entre la vida oculta personal y la laboral siguiendo las credenciales del subgénero de espías. Stan va a tener que posicionarse con ese chantaje impuesto por Oleg y pedir a Nina pasar la prueba del polígrafo. Nina está dolida y Stan enfrentando a la situación más complicada. ¿Involucrará también el KGB a la mujer de Stan con nuevo y potente paralelismo para Elizabeth y Phillip y unir ambas tramas y conflictos familiares? ¿Hasta dónde llegan en realidad los planes de Oleg con Stan?


Philip y Elizabeth tendrán su reunión haciéndose pasar por agentes de la CIA con Larrick y descubrirán que no fue aquel que mató a Emmett y Leanne. Además, tiene información vital sobre una operación llamada Martial Eagle que le sirve de coartada. Al parecer, los comandantes en jefe de la Contra se dirigen hacia EEUU para ser entrenados en suelo norteamericano. La central necesita saber cuándo llegarán los comandantes y dónde están los campos por lo que (y a pesar del riesgo) Larrick es una pieza fundamental y Philip y Elizabeth tendrán que ocupar el rol de extorsionador de Emmett y Leanne sobre el antiguo miembro de operaciones especiales gay. Es momento de recuperar a la espía de Nicaragua y que nos planteemos los paralelismo entre el pasado y el presente de Elizabeth y Lucia. Con la información conseguida, Lucia tendrá que acabar con ese peligro y atar los cabos sueltos. El ayudante del congresista morirá por una sobredosis provocada por Lucia mientras ARPANET, un sofisticado sistema para compartir información, entra en escena. La era de Internet comienza a ser el futuro y “The Americans” también se posiciona dentro de esa perspectiva. Y, con todo lo anterior, ¿quién mató a Emmett y Leanne? 


Claudia es la responsable indirecta y entendemos por qué estaba tan dolida con todo el asunto. Se implicó emocionalmente con alguien mientras trabajaba con ellos y al revelarle la verdad sobre su identidad pudo haber comprometido su seguridad. Vemos a una Claudia mucho más frágil y Elizabeth parece rebajar aquí su odio contra la ‘anciana’ al confirmarle que se equivocó respecto a su opinión de su relación con Philip. La soledad es peligrosa en el mundo de los espías y que también tu mujer elija una puerta roja como acercamiento al pecado de Stan para dar título al capítulo. ¿Veremos el plan real del inteligente Oleg o nos reservan sorpresas con agentes ‘triples’ por el camino junto a una unificación de todas las tramas para la recta final de la temporada? De momento, la violación sufrida por Elizabeth así como los sacrificios sexuales que tuvo que realizar en su pasado empiezan a emerger con conflicto de sus decisiones presentes.

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