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viernes, 22 de febrero de 2013

The Americans (1x04) In Control: Atentado contra Ronald Reagan

FX ha anunciado que “The Americans” tendrá una segunda temporada. Con cuatro capítulos emitidos, la ficción de espías ha encontrado un hueco en corazón de muchos seriéfilos al despegarse rápidamente de las comparaciones previas con Homeland. Ni ritmo, ni estética, ni personajes… y ni siquiera trasfondo. Aunque la familia es pieza fundamente, los espías soviéticos infiltrados en Washington DC en los años 80 tienen suficiente bazas y juego colateral para crear una serie con proyección de futuro. Buenas críticas y datos de audiencia avalan la propuesta y 13 capítulos para esta primera temporada deberían colmar todas las posibilidades de unas de las pocas nuevas ficciones salvables del midseason. “In Control” es el cuarto capítulo de la primera temporada de “The Americans” y es momento de repasarlo.


Nuevo jefe y nuevas misiones… pero un cambio y hecho histórico dará un giro brutal. Los rusos, gracias a la escucha colocada en el despacho del Secretario de Defensa, saben que los americanos están coordinando con Gran Bretaña un sistema de defensa de misiles nucleares. Es decir, la URSS podría ser un objetivo al no poder impactar con sus misiles en sus enemigos y quedar a completa merced de los mismos. Stan Beeman tiene su contacto dentro de la embajada rusa y parece que, por fin, Elisabeth tiene sentimientos ‘reales’ hacia Phillip. Un flashback del pasado nos mostrará la desconfianza de su madre hacia los hombres…


Ronald Reagan ha sufrido un atentado y ha sido disparado. En un ambiente paranoico la conspiración emerge y la CIA quiere saber si la KGB está detrás del incidente. Reagan está hospitalizado y todo es incierto. A Phillip y Elisabeth les coge la noticia en un hotel celebrando lo que parece su luna de miel (de verdad). Está claro que uno de los juegos de la serie va a ser la propia relación sentimental entre ambos, que podría suponer su perdición y aquí se topará con algunas diferencias ya mostrados en el piloto. Phillip ve su papel como espía determinante para mantener fría la Guerra Fría y veremos que en “In Control” la información de la pareja es vital para los intereses del KGB y el gobierno ruso. De nuevo, observaremos también la maraña de contactos y conspiratoria que durante años Phillip y Elisabeth han ido tejiendo: desde periodistas afines a la causa hasta contactos para conseguir piratear líneas gubernamentales. E incluso se nos muestra cómo envían los mensajes cifrados por radio a Moscú.


El FBI quiere buscar alguna conexión de Hinkley, el tirador, con el partido comunista y el KGB… mientras que el KGB se prepara para un operativo en caso de que Reagan fallezca y un militar se pueda hacer cargo de una situación que ponga en peligro a todos. La Operación Christopher está en marcha y pasa por volar la tapa de los sesos a Weinberger si se pone muy ‘pelotudo’. Un guardia de seguridad da con su furgoneta y va a avisar a la policía por lo que Elizabeth tiene que asesinarle. Es un mal menor, teniendo en cuenta que el contacto de Beeman es fundamental pero Nina puede ser expuesta un momento tan delicado. Es más, desde la embajada la siguen pero finalmente puede hacer ‘contacto’ más adelante. ¿Acabarán Beeman y Nina enrollados? En este capítulo descubriremos que está alejado de su mujer (y de sí mismo) por su misión anterior. Nina, no obstante, le revelará que los rusos no están detrás del atentado. En un encuentro de Phillip y Elisabeth con Beeman se enterarán que Hinkley es el típico idiota que cometió el crimen para impresionar a Jodie Foster y que el FBI ha descartado que el KGB esté detrás de todo. ¿No podían haber empezado por ahí? Da la impresión de que nadie quiere que empiece la Tercera Guerra Mundial… aunque parezca que todo pasó por unos vecinos que vivían enfrente: unos eran espías rusos… y, el marido de los otros, agente del FBI a la caza de los mismos. Philip pasará la información del FBI a Moscú para que sepan que el gobierno de EE.UU. no va a culpar a la URSS por el intento de asesinato de Reagan. Paige, al igual que Dana Brody en “Homeland”, parece un elemento que puede cobrar importancia en el futuro. De momento, sigue en su pubertad y haciéndose mujer... Lo mismo la vemos liada con el hijo de Beeman enredando (y al mismo tiempo uniendo) todo definitivamente. Al igual que esta serie… que sigue creciendo y madurando. 

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