Páginas Bastardas

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Rango: Un nuevo oasis en el seco desierto del cine de animación en 3D

“Rango” 
(2011) 
EEUU 
Director: Gore Verbinski


Sinopsis (Página Oficial):

“Rango” es la historia de un camaleón en un día de soledad en la inmensidad del desierto de Mojave. Rango quiere ser un representante de la ley en un sediento pueblo llamado Dirt. Este lagarto actor siempre ha querido interpretar el papel de héroe y por fin encuentra un público que necesita uno. Rango enseguida se da cuenta de que hay gran diferencia entre actuar y la vida real y se ve forzado a enfrentarse a algunos aspectos de su identidad y a aprender el significado de la amistad.

Crítica Bastarda:

¿Es “Rango” un “Buscando a Nemo” al otro lado de Pixar? ¿Al otro lado de ese gran desierto de ideas (y copias) con ese oasis que incluye títulos Toy Story 3 o “Up”‘Todos tenemos que hacer nuestro propio viaje’, nos cuentan en la película y también el espectador realiza un viaje, en esas carreteras llamadas cine de animación en 3D, en el que cada vez aparecen más hoteles peligrosos (seguramente regentados por Norman Bates en 3D) en los que parar, repostar, fijarse y disfrutar se convierte en una tarea prácticamente imposible.

Vuelve Tatooine y el Western
“Rango” tiene truco y narrador que nos narra una historia por escribir. La pluma, por lo tanto, es libre y el juego de actuación inicial invita a la rareza y el descoloque y al juego metaficcional. La película del director de “Un ratoncito duro de roer” es una historia que arranca desde la búsqueda de otra sin trampa ni cartón (aunque con sobredosis de LSD). Puede ser vista como una trascripción del propio pueblo americano: raro, extranjero y sin identidad propia. Erigido y esculpido desde la ley del oeste, pulido por el western a nivel cinematográfico, y creador de falsos héroes y mitos por el boca-a-boca. Poco-a-poco ese manifiesto imperialista quedó relegado, como vimos en “Pozos de ambición”, al capitalismo solitario a golpe del futuro bien universal: el agua contante y sonante. En sueños en el espejismo del desierto. ¿Es ese guiño al Tatooine de “Star Wars” del enésimo énfasis del cine comercial americano? ¿El de la espectacularidad como entretenimiento de alcanzar el corazón de los espectadores? Toca corromper los géneros a golpe de spaghetti western, de la parodia de la referencia y de cantar en vez de narrar. Ese así como se consigue el estilo propio y como se consigue hacer una película para todos los públicos perpetrada con oficio e inteligencia.

Spaghetti Cameleónico
Aquí la etiqueta sobra porque se juega al beneplácito de la rareza sugestiva a golpe de referencias e agudeza por los secundarios. Las aventuras y el reciclaje, la paranoia de lo ambiguo y la actuación como salvación. “Rango” es cine de entretenimiento inteligente puesto al servicio del camaleónico star-system y de la sobredosis de agilidad en la acción. Pura delicia entre ojos saltones y aves incorregibles de corral. Moldeado al guante de su carismático y cambiante protagonista que se funde con ese Johnny Depp digitalizado que da vida por movimientos a su álter ego animal: el gatillo más rápido de un oeste reciclado y reinventado. 

2 comentarios:

  1. Buena peli, realmente me gustó. Y nada feliz navidad y espero que 2012 sea un buen año :)
    Saludos bastardos, Daniel

    ResponderEliminar
  2. Hola Daniel!
    Me parece la mejor película animada del año con diferencia sobre "Tintín" y "Arthur Christmas". Espero que gane el Globo de Oro y el Oscar,

    Saludos bastardos y gracias por el deseo sobre el 2012. Esperemos que se cumpla. ;)

    ResponderEliminar

Lea antes los Mandamientos de este blog.