¡Perros Voladores!
A veces el destino nos juega malas pasadas o sus maquiavélicas conspiraciones son tremendamente pesadas. Esta entrada inicialmente iba a retratar las peripecias personales en una mañana que se fundió con el sueño, más tarde debería servir a la sangre hervida y en su punto, que iba a tomar su posesión natural y semanal pese al cierre temporal de establecimiento, e incluso los previos y resúmenes de la actualidad ‘pelotística’ (no confundir con la crónica depor-rosa que ha puesto de moda La Cabronero) tan llamativos y requete-usados-y-usurpados por los cronistas del día al día.
No tener un tema-temático resulta liberador pero este blog, en definitiva, es monotema y se podría resumir en un piñón fijo. Las historias bastardas del día a día dan pie a lo extraordinario porque llegan desde el anonimato de lo fortuito y uno corre el riesgo de que pasen al ostracismo mental. A ese olvido perpetuo del que no lo rescatará ni por la varita mágica extractora de recuerdos utilizada en la saga de Harry Potter.
Un correo electrónico daba señales de una noticia que corría por la red expandiéndose, a modo viral, y no era otra que ayer, 5 de Julio del 2010 a la 01:21, era el instante en el que Marty McFly regresaba al futuro en el De Lorean. Noticia friqui y significativa que circulaba en la temporalidad del ciberespacio y lo virtual. ¿Quién no ha visto la saga Back to the Future?
Por otro lado la noticia de un coche volador cobrara forma ayer en mi mente, 5 de Julio de 2010, aunque ya era pasado y al mismo tiempo futuro… La curiosa noticia había salido a la palestra días antes. Se llama Transition y es el primer coche volador autorizado a volar y circular aunque no se sabe por dónde. No es el primer intento pero sí va a ser el primero en comercializarse, al menos ya tiene licencia al otro lado del charco. Olvídense de esa imagen final del De Lorean de “Regreso al futuro” volando porque este Transition es simplemente un coche convertible en avioneta o avión ligero para ser más exactos. Parece más un coche transformable para una de James Bond. 194.000 dólares americanos (unos 160.000 euros) y uno de ellos puede ser suyo. Tiene dos plazas y no sirve para una madre española habituada a cargar un automóvil con tres toneladas de objetos, ropa y utensilios ‘imprescindibles’. Al menos sus alas son plegables y por lo tanto se puede dejar en un garaje tradicional aunque cuando se pone en plan transformer se estira hasta los ocho metros y se pone a 185 kilómetros hora… ¡sin atascos! El De Lorean tenía que llegar a los 240 para viajar en el tiempo y fumigar con líneas de fuego cualquier ser que osase a pisar su mismo asfalto. Un Transition en la Gran Vía madrileña podría rebanar 240 cabezas...
Ya hay setenta pedidos de Transition y puede que algún ricachón se empotre en el ala oeste de su mansión. No sé si será digno de celebrar pero tal vez alguno de sus herederos le regale uno para navidad. Eso sí, es necesario licencia de piloto deportivo aunque sacaran en España una autoescuela del tipo Cuenca, esa en la que te dan el carné por soltar unos euritos de más.
Si Tamara Falcó compra uno… ¡huyan! ¡No salgan ni a la calle! El cyber-remake de “Los pájaros” de Alfred Hitchcock cobra nuevas dimensiones aterradoras. ¡Las famosas y famosos que han sacado sus carnés ‘voladores’ toman los cielos de Madrid! Esto no una engarce lógico para “Blade Runner” o “El quinto elemento” sino para ¡“El quinto esperpento”! Todo narrado por supuesto en el “Sálvame Redux” (no lo confundan con esa otra imitación llamada “Sálvame Deluxe
Horrores y esperpentos aparte, será que el futuro no está escrito o tal vez esté para algunos, aunque recogiendo el final de la trilogía y esa pregunta que le lanza Marty a Doc y pone el broche final:
—¿Regresarás al futuro?
—No, ya he estado allí.¿Quién no ha estado allí? ¿Dentro de la saga Back to the future? Allí también había perros voladores, viajeros del tiempo y monopatines voladores (el día que los inventen no salgo tampoco a la calle) pero al parecer muchos no han visto realmente “Regreso al futuro”, ni la uno, ni la dos, ni la tres… El fotograma con la fecha del 2010 es un fake monumental ya que la fecha que marca el 21 de Octubre de 2015 a las 4 de la mañana. Efectivamente, se trata del regreso al futuro de alguien anónimo o simplemente a virus viral para que desempolvemos de nuestra dvdteca, redteca o digitalteca este clásico de la taquilla de los ochenta y volvamos volando a ese futuro que nos presentaban Robert Zemeckis de la mano de Steven Spielberg. O tal vez sea que a veces el destino nos juega malas pasadas o sus maquiavélicas conspiraciones son tremendamente pesadas y esto es un auténtico (en destination time) Fake to the Future.
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