Páginas Bastardas

viernes, 26 de enero de 2018

Runner, Runner: Apuesta máxima… BODRIO

“Runner, Runner”
Director: Brad Furman
EEUU
2013

Sinopsis (Oficial):

Justin Timberlake y Ben Affleck protagonizan este thriller de alto riesgo donde la tentación del dinero fácil es la más arriesgada de las apuestas. Cuando el estudiante de Princeton, Richie Furst (Timberlake), descubre que ha sido estafado, viaja a Costa Rica para enfrentarse al magnate de las apuestas online Ivan Block (Affleck), al que cree responsable. Es entonces cuando Richie se verá atrapado en un peligroso juego de poder entre las tentadoras promesas de riqueza y grandes ganancias de Block y el perseverante agente del FBI (Anthony Mackie) que intenta hacer caer al poderoso millonario.

Crítica Bastarda:

Prenominada a 3 Razzies (Peor Película, Actriz y Actor), “Runner, Runner” salió de rositas en las nominaciones finales pero quedó incluida entre las peores películas de 2013 para público y crítica. Con solo decir que «es una película de Justin Timberlake y Ben Affleck» se incluyen tres conceptos unidos que incitan al suicidio… como si volvieran a rodar “Daredevil” exactamente igual pero con Timberlake haciendo de Elektra. O sea, BODRIO. O sea, BODRIO. O sea, BODRIO. O sea, BODRIO. O sea, BODRIO. O sea, BODRIO. O sea, BODRIO. O sea, BODRIO.  ¿Ha quedado claro? B-O-D-R-I-O. En Latinoamérica y Brasil se tituló “Apuesta máxima”. Así que re-titulemos la cinta como “Apuesta máxima… BODRIO”. ¿Y cómo poder superar a un BODRIO con otro BODRIO? 


De Princeton a un sinsentido en a Costa Rica.

De un thriller de gente lista a una tomadura de pelo.

De algo sofisticado a un mojón con póquer y estafas a gran escala. 

Entre esos tratos de los agentes del FBI que no se cree nadie.

Entre esos ingredientes tan estúpidos como artificiales sobre los juegos de azar online.

Entre esas apuestas absurdas y giros de guión desperdiciados y cutres.

Entre que todo es tan predecible como tan poco inteligente. 

Entre que Justin Timberlake y Gemma Arterton tienen menos química que una vaca y chimpancé. 

Entre que “Runner, Runner”, al final, hace que quieras correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr… correr, correr…


¡CORRER!

¿Nos apostamos algo?

¡“Apuesta máxima… BODRIO”!

B-O-D-R-I-O.

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