Megalodón: Megamojón, Megatruñón, Megabodrión

“Megalodón”

Título original: “The Meg”

Director: Jon Turteltaub

EEUU / China

2018

Sinopsis (Página Oficial):

Un sumergible de aguas profundas que forma parte de un programa internacional de vigilancia submarina, ha sido atacado por una enorme criatura que se creía extinta. Ahora está averiado en el fondo de la fosa oceánica más profunda del Pacífico con su tripulación atrapada en el interior. El tiempo se acaba y, en contra de los deseos de su hija Suyin (Li Bingbing), un visionario oceanógrafo chino (Winston Chao) contrata a Jonas Taylor (Jason Statham), un especialista en rescate en aguas profundas. Su misión será salvar a la tripulación y también al océano de una amenaza imparable: un tiburón prehistórico de 23 metros conocido con el nombre de Megalodón. Pero lo que nadie podía imaginarse es que unos años antes Taylor ya se había enfrentado a esta misma criatura aterradora. Ahora, formando equipo con Suyin, debe superar sus miedos y arriesgar su vida para salvar a todos los que están atrapados en las profundidades, lo que le obligará a volver a enfrentarse al depredador más enorme y más temible de todos los tiempos.

Crítica Bastarda:

“Megalodón” es el último intento de la industria norteamericana de alcanzar una comunión con el imperio del box office chino. Se trata obviamente de una réplica de anteriores monster movies como de “Jurassic World” en la que puede parecer que Jon Turteltaub tiene poco guion explotation que rascar. Aquí no habitan las virtudes (y locura) de la propuesta de Colin Trevorrow pero, sin embargo, sí estamos ante un elaborado insulto a la inteligencia para distraer incluso a un público bastante amplio. No faltan toda clase de trucos e incluso añadir esos condimentos argumentales necesarios para que el mercado chino esté contento. La película de Turteltaub es un producto no demasiado bien fabricado con sirope refrigerado para el verano. En resumen, todo es bastante previsibles y con sorpresas mínimas en una historia en la que no falta una tensión sexual poco destacable (y descafeinada) o un conflicto del héroe que no va más allá de una rúbrica. El producto quiere dar sustos constantes a niños y perros, como si en cierta medida nos hablara el infantil fondo de la propuesta. No hay opción posible para no apedrear un filme con un gran tiburón prehistórico con mojón en un infecto verano de cine comercial rancio y casposo. Para eso nos quedamos con esa gran joya del cine cutre titulada “Terror en el abismo” y esos escualos adictos a la fibra óptica y elaboradas muertes cochambrosas. Es posible que recordemos este engendro como una de las películas del verano de 2018 o, por el contrario, aquella en que salía Jason Statham y una china que se mete en una bola china que intenta meterse por el orto un tiburón prehistórico cachondo. O, lo que es lo mismo, todo un drama dreyeriano. 

Historias Bastardas Extraordinarias by Maldito Bastardo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.