Chance: Elecciones

Serie de TV

“Chance”

EEUU

2016

Sinopsis (Página Oficial):

Basada en la novela de Kem Nunn, Chance es un provocador thriller psicológico protagonizado por el neuropsiquiatra forense Eldon Chance (interpretado por el ganador de un Globo de Oro, Hugh Laurie) que reside en San Francisco y muy a su pesar se ve envuelto en el peligroso y violento mundo de las identidad erróneas, la corrupción policial y las enfermedades mentales. Tras tomar una decisión desacertada para ayudar a una atractiva paciente (Gretchen Mol conocida por “Life on Mars”, “Spin City”), que podría tener un trastorno de personalidad múltiple­, Chance se encuentra en el punto de mira de su esposo abusador, que también resulta ser un despiadado agente de policía.

Crítica Bastarda:

A veces me pregunto si es por esa clase de geometría que nuestras vidas son nuestras vidas esos encuentros aleatorios en el tiempo y el espacio. Es solo la más pura coincidencia. Si creía en el libre albedrío…

Toda oportunidad y cambio en el destino supone que una persona no vuelva a ser la misma y la vida de la gente se transforme irreversiblemente. Es interesante un planteamiento geográfico que se establece en la serie de Hulu en la que las vidas son geometría; encuentros aleatorios en el tiempo y en el espacio. ¿Todo es pura coincidencia o somos responsables de nuestros propios actos? Tal vez tanto la personalidad múltiple como esa división de una persona, cada vez que su vida se transfigura, se establezca en la paradoja de Banach-Tarski y el axioma de la elección. Ese teorema contradictorio refleja «cómo una esfera sólida en un espacio tridimensional puede dividirse en una cantidad finita de partes no superpuestas, que pueden ser rearmados y dan como resultado dos copias idénticas de la misma esfera». “Chance” actúa como un thriller psicológico con toques clásicos a la novela negra donde no falta la dosis mínima de erotismo o una mujer fatal. Quizás le falta un toque y tono superficial para triunfar entre el gran público y una concepción más noir para epatar a los seriéfilos más selectos. Adaptando la novela homónima de Kem Nunn, el propio autor junto a Alexandra Cunningham desarrollan una historia con un toque diferente a la femme fatale y a los peligrosos entresijos e infiernos que se desatan cuando un neuropsiquiatra trata de ayudarla y protegerla de su esposo. Hugh Laurie da la impresión de lucirse en esa clara contraposición a su personaje de “El infiltrado”, acercándose a una percepción de la fragilidad que también esconda un planteamiento oscuro en su interior. 

Tal vez “Chance” sea víctima de su ritmo lento y proposiciones claramente psicológicas. No importa la acción explosiva sino el desarrollo y profundidad del conflicto, como si todo ese azar en los planteamientos de la psicosis que retrata fueron tanto el cebo ante la audiencia como su propia perdición. En realidad, he aquí una historia detectivesca en la que el protagonista descubre su oscuridad y acaba cometiendo un crimen. No es que estemos ante un espectáculo similar a “Search Party” pero, sin embargo, existe cierta pretensión de conformar la intriga como un concepto quebradizo. En el caso de la serie de Alexandra Cunningham y Kem Nunn la idea es explorar los mecanismos del subconsciente humano a través del enfrentamiento de sus dos personajes principales. ¿Está dispuesto Eldon Chance a convertirse en un justiciero como D? ¿Existe algún punto en común entre ambos posicionamientos? La historia de un neuropsiquiatra, que ha caído en las redes de la inestabilidad de su vida, pasa del eje e influjo de una femme fatale (Gretchen Mol) a nuevos horizontes en su segunda temporada dentro de los márgenes de ese mundo de depredadores y personas recompuestas que no volvieron a ser las mismas. Es obvio que el debate moral está servido y los escritores saben reciclar personajes como aquel interpretado por Brian Goodman o la propia hija de Eldon para que las tramas avancen y tengamos una extraña y nueva concepción sobre las series de vigilantes. ¿Podrán salvar a los pacientes ajusticiando de esos monstruos que los condenaron?  “Chance” trata sobre impulsos oscuros y la complejidad de la mente humana y los traumas que afectan a los seres humanos. ¿Y si todo cambiara y aquellos seres dañinos fueran quitados de la ecuación? ¿Podrían sanarse sus víctimas de esas elecciones impuestas o, por fin, hallarán el libre albedrío? 

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