Quarry: Camino a la perdición

Serie de TV

“Quarry”

EEUU

2016

Sinopsis (Página Oficial):

Ambientado en Memphis, a principios de los años 70, “Quarry” es un intenso drama que se centra en el personaje de Mac Conway, un marine que vuelve a casa tras una segunda misión en Vietnam. Al volver, ve que es rechazado por el resto al haber participado en lo que se vendió públicamente como una gran masacre mientras se encontraba fuera combatiendo. Pese a que a él y a su compañero Arthur Solomon los exoneraron de cualquier delito, se enfrentan a la hostilidad y el rechazo de Memphis y no consiguen encontrar un trabajo decente. La relación de Mac con su mujer es cada vez es más débil pero, en ese momento, él y Arthur son tentados por una generosa oferta de El Broker, un turbio criminal envuelto en una red de asesinatos y corrupción que se extiende por todo el río Misisipi. Al principio, Mac rechaza ofrecer sus servicios a El Broker, pero después de que Arthur deje de lado sus principios a cambio de dinero rápido, Mac (a quien El Broker pone el sobrenombre de Quarry), abandona su sentido común para unirse al equipo de este, lo que tendrá consecuencias horribles tanto para él como para Joni.

Crítica Bastarda:

Se necesita cierto tipo de hombre para hacer este tipo de cosa. Vacío por dentro, duro como una roca…

Hablemos del final antes que del principio siguiendo la estela de ambigüedad de la obra. La cancelación de “Quarry” dejó, en cierta medida, conmocionada a una parte de la platea seriéfila por el adiós a una de las novedades televisivas que más habían convencido a crítica y público en 2016. La propuesta de Cinemax, estrenada en España a través de HBO, hablaba sobre la imposibilidad de alcanzar la paz para los soldados una vez que atraviesan ese velo de muerte, tinieblas morales y oscuridad interior. Michael D. Fuller y Graham Gordy parecen haber sido víctimas de los nuevos regímenes de explotación del mercado en el que Fuller detallaba en su blog un proceso alargado y agonizante. Vendida a la cadena en 2013 y rodando su piloto en ese mismo verano, “Quarry” recibió el visto bueno un año después y entro producción en primavera de 2015 para, posteriormente, ser estrenada en otoño de 2016. Ese proceso de creación va en paralelo al agotamiento mental de la historia que pretendían contarnos a lo largo de varias temporadas y que, contrariamente, se vio truncada tal vez por nuevos modelos. Basada en la serie de libros de Max Allan Collins, autor de la novela gráfica “Camino a la perdición”, “Quarry” pudiera haberse convertido en una de las grandes series de culto de la pequeña pantalla al moverse sabiamente entre el noir sucio setentero, el drama psicológico o el thriller criminal. A través de nuestro antihéroe vamos a ir descubriendo los bajos fondos de la década de los 70 en Estados Unidos y conociendo a peculiares personajes entre una brutalidad manifiesta que nos revela, irónicamente, que la guerra se ha trasladado al suelo norteamericano. En cierta medida, podemos entrever ciertas similitudes con Jimmy Darmody de “Boardwalk Empire” aunque aquí tengamos un tono mucho más sombrío y esa atmósfera impuesta por esa fricción temática de Memphis y el río Mississippi. 

1972. Dos soldados regresan de la Guerra de Vietnam y descubren que el pasado que dejaron atrás es irrecuperable y sus hogares han cambiado tanto como ellos mismos. Al contrario que en otras guerras, plagadas de patriotismo, en “Quarry” divisamos tanto la desidia como la oposición a un conflicto bélico de la sociedad en el que no existen vítores ni flores para esos hombres que retornaron del horror convertidos en monstruos. Precisamente la serie de Cinemax plantea la demonización de ese par de veteranos, por participar en la masacre de Quan Thang, por parte de ese pueblo que ha dejado de entender de máscaras para proteger a los asesinos. Y Mac Conway (Logan Marshall-Green) y Arthur (Jamie Hector) están condenados tanto a enfrentarse a sus demonios —al ser víctimas del estrés postraumático— como a seguir permutando y perpetuando su nueva condición de verdugos dentro de una sociedad que únicamente les ha dado esa etiqueta para sobrevivir. El agua es fundamental en “Quarry” para entender esa metáfora sobre la distorsión de uno mismo y los pecados que han de ser lavados pero también, y al mismo tiempo, sobre ese líquido que fluye para desgastar una piedra llamada conciencia sobre los terribles crímenes que cometieron en Vietnam. Simplemente seguían órdenes pero, no obstante, el conflicto es conocer si existe algún síntoma de arrepentimiento y odio hacia sí mismos (y aquello que representaban). La otra opción es lidiar con el monstruo interior dándole una vía libre para cometer nuevos crímenes… y aquí surge la figura del misterioso hombre que interpreta Peter Mullan como ‘demonio’ capaz de tentar a ese par de soldados. La sangre ha de seguir corriendo… La serie de Cinemax también retrata la impotencia de enfrentarse a los males interiores del ser humano, dejando en ese escenario acuoso y opresor la síntesis contraria a una liberación. Mac Conway revela, además, la inestabilidad mental junto a la desolación que enmarca su personaje junto a la determinación y crueldad para cometer sus nuevos crímenes. La rueda de la muerte ha de seguir rodando y el espectáculo no lo pone fácil para una audiencia que desee un acercamiento menos complejo y esperanzador a la Guerra del Vietnam y sus heridas latentes en la sociedad estadounidense de los 70. El arco argumental de The Broker y su interconexión con el resto de historias así lo demuestra. De la misma manera, “Nuoc Chay Da Mon” (1x08) funciona a la perfección como esa mezcla de contrastes en los que la brutalidad y ciertos elementos ‘inocentes’ pueden convivir en el mismo plano. Pensemos en que la única temporada que compone “Quarry” trata sobre la transformación de Mac Conway en esa cantera tan vacía y dura como una roca, tratando de hallar una redención a través de un viaje circular plagado de muerte y autodestrucción; de claras y hábiles metáforas visuales que nos hacen confundir el conflicto del personaje con el escenario. ¿Podrá nuestro antihéroe llegar al otro lado del río o es él el propio río?

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