Podríamos definir esta tercera temporada de “La chica invisible (Awkward)” como irregular y una prueba de fuego para el personaje principal. Si bien el comienzo nos demostró que la comedia tenía que renovarse o morir, el retorno ante la partición de la entrega de episodios ha cimentado esa transformación de Jenna Hamilton en una bitch y chica mala siguiendo el tradicional cliché. Vimos algo parecido con “Once Upon a Blog” (2x11) pero en esta ocasión las drogas y el aislamiento que proponen esa nueva pareja bohemia llamada Collin, contrasta plenamente con la imagen inicial de ese escritor que vivía sus experiencias al máximo para sacar tajada dramatúrgica de todo el asunto. ¿Un poco cliché? ¿Aunque no ha demostrado “La chica invisible (Awkward)” que funciona plenamente volteando cualquier estereotipo? “The Bad Seed”, decimocuarto capítulo de la tercera temporada de la serie de MTV, va aclararnos el camino a la perdición de Jenna Hamilton y lanzándose a dotar de sentimientos a Sadie Saxton. ¿Cambio de roles al canto?
La espiral de perdición que propone “The Bad Seed” (¿homenaje a la evil-baby de Rhoda que protagonizó el filme de Mervyn LeRoy allá por 1956?) va a comenzar y finalizar con la misma secuencia en esa noche y día interior de Jenna. Nuestra cada vez más detestada protagonista va a caer en el consumo de marihuana gracias a ese chico malo, eludiendo su lado bohemio impuesto por el también olvidado ¿y desaprovechado? Mr. Hart. ¿Tendrían que haber explotado más la trama literaria y la implicación del autor en las vivencias de los personajes o quieren lanzarse a una actualización de “Tell Your Children (Reefer Madness)”. La Hamilton va a ser el mal ejemplo y se va a juntar con malas compañías asilándola de sus antiguas amistades que hacen frente común con Matty al confirmase que la villana de todo el asunto tiene un único nombre: Jenna. La escritora del blog más inspirado ahora va a declinar sus disculpas con sus Jenn-emies y veremos a un Matty que sigue preocupado por ella, recibiendo las afiladas garras de su ex sobre su propio ser. ¡Hasta Devon nos cae bien!
Si bien vamos a tener la ascensión de Jenna a la categoría de bitch, la otra ‘bruja’ de la serie va a mostrarnos su reverso más humano. Sadie Saxton descubrirá que no la quiere ni su madre, que vuelve de su Campamento de Agotamiento o spa para resumir. Darlene Saxton se ha echado novio allí tras la quiebra económica y la fuga de su marido. Se llama Francois y no es hippy sino sanador y la idea de Darlene es que su hija vuelva con ella a Santa Fe para iniciar una nueva vida. ¿El reverso de “Iluminada”? Sadie únicamente tenía a Consuela, a su tío Dan y a Ally Saxton, que unirá cuasi-seguramente los universos de Sadie y Jenna. Tendremos una subasta pública de Sadie a manos de Valerie Marks y los antojos de Ally por tener un bebé se hará realidad con una evil-baby en bancarrota y fuertota. Sadie estará a punto de derramar una lágrima ante su emancipación anunciada y debe unirse a la disfuncionalidad familiar… aunque Ally es una brillante apuesta para que Sadie tenga la ¿madre? que merece toda bitch.
Del cuasi-arresto de Jenna, el castigo de su padre y la pérdida de confianza de su madre, tendremos más pasos por esa caída hacia su oscuridad. Matty fue santificado y Collin demonizado por los guionistas y esperemos que sea para parodiar los resortes morales de esa venidera parodia a “Reefer Madness” que se avecina con el cambio de roles entre Jenna y Sadie. Si fuera filmada por Abed de “Community” auguraría el éxito de una apuesta un tanto manipulada en sus planteamientos. ¿De verdad que Matty va a ser tan bueno y Collin tan malo? ¿Ahora Collin es drogadicto, un chico malo y una mala influencia de repente? La idea es interesante porque Jenna caerá en los infiernos y sus ex amigos tratarán de rescatarla de su camino a la perdición o simplemente se quemará en los avernos que ella misma ha ido sembrando. Con el sexo entre Collin y Jenna como decisión precipitada de la chica y la pérdida de confianza de su madre, las lágrimas de la chica invisible nos parecen de cocodrilo y simple postureo. Esperemos que ahora “Awkward” se lance sin una red de demagogia, falsa moralidad y que confirme que las sensaciones desde el cierre del primer bloque y división de esta temporada, supongan un trampolín a la originalidad... aunque que la creadora sea la primera rata en abandonar el barco no es una buena señal.
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