“Arrow” se ha convertido en uno de los estrenos otoñales más interesantes no por su
éxito, buena recepción de público y crítica o apartarse de la senda bobalicona
de The CW, sino porque es simple y eficazmente entretenida. Puede
que no haga historia pero como otras series del firmamento catódico no tiene
una competencia directa… salvo las críticas que ha recibido por apartarse del
material original y buscar una vía nolanista de escape. Los ideales han
pasado al sentido de la venganza y a muchos les sigue sin quedar claro si
estamos ante un Robin Hood contemporáneo o una revisión justiciera con flechas de
Batman. Hay que recordar que el nacimiento de sendos personajes es tan parejo
como afín y que la gracia de la serie es que pretende enfocarse y propulsarse
al margen del material original. Todo puede ser posible y “Legacies”, sexto
capítulo de la primera temporada de “Arrow”, llega para leernos
nuevamente la cartilla con una afilada flecha.
Se ha criticado bastante el cambio de motivación del héroe en la serie. Se
trata de venganza, apartándole de los ideales impuestos en las viñetas para
proteger a Starling City. Precisamente “Legacies” va a tratar la dicotomía
de ser un vigilante pero tener que aplicar justicia por los errores pasados que
originaron la venganza. Y es que Diggs va a recordar a Quinn que esta ciudad le
necesita más que la lista con la que pretende redimir la memoria y sacrificio
de su padre. Vamos a hallar paralelismos entre una familia que se dedica a
atracar bancos y la relación entre Quinn padre e hijo. Recordemos que en los
flashbacks anteriores, Oliver quedó atrapado en una cueva al cerrar la salida
su salvador. Sus alucinaciones y ensoñaciones le llevarán a enfrentarse con el
motivo que originó su llegada allí y el sacrificio que realizó su propio padre
para que sobreviviera. El capítulo va a tratar de hijos descarriados y
sacrificios paternos para enderezar el rumbo futuro de los vástagos. Aparte de
descubrir el nombre del ‘Flecha Verde’ de la Isla Purgatorio, Yao Fei, vamos a
establecer a qué es debido que Oliver se aferre a la libreta de su padre.
Después del enfrentamiento onírico y la lección de sobrevivir a toda costa para
salir de la isla y completar su venganza, Oliver descubrirá que la libreta en
blanco contiene una lista de nombres al acercarla al fuego.
Anteriormente nos hemos preguntando qué va a aportar Tommy en la serie. Va
a funcionar tanto como reflejo de lo que era Oliver, como ese punto necesario
para formar el triángulo romántico con Laurel. El problema es que la ex novia
de Oliver no es materialista sino idealista… y ser billonario poco importa.
Tommy va a intentar recuperar aquella aventura romántica que tuvieron juntos ya
que para él Laurel es algo más. Es cierto que estamos ante una serie de The
CW y el rollo bobalicón-romántico va a en el pack, queramos o no. Para
complicar un poco el asunto, Thea también ha echado el ojo al amigo de su hermano…
aunque éste le considere una hermana pequeña. Tommy organiza una fiesta para
recaudar fondos a la que acudirá Carter, el cirujano-agente, que se vende como
el hijo perfecto y la pareja perfecta. A veces no basta tan perfección y hay
que mancharse las manos. Thea se emborracha y monta un número mientras que
Tommy siente celos al ver cómo Laurel bailaba con Carter. Realmente todo
confluye en una catarsis con vómito. Laurel cumplía con su papel al haber
realizado una alta donación Carter y pensar que es un auténtico idiota
integral. Parece que Laurel comienza a ver al Tommy menos materialista mientras
que Thea pasará una buena resaca e intentará olvidar todo lo ocurrido.
Scott Morgan tendrá que esperar porque Quinn, por intervención de Diggs, va
a dar con el paradero de la peculiar familiar que roba bancos para darse cuenta
que es una consecuencia de los actos de su padre en el pasado. Arrow entra en
comisario para robar archivos policías y pruebas un tanto sonrojantes, como la
huella de un anillo en la cara de uno de los criminales. Las pistas y un
encuentro con los delincuentes le llevan a Kyle Reston pero también a su padre Derrick,
que trabajaba para su padre siendo despedido y dejándole en la calle y sin
hogar por llevarse la empresa subcontratada a China. Queen decide reunirse como
Queen con él para darle una oportunidad y un trabajo… pero los paralelismos
entre los Queen y los Reston son visibles. El padre tendrá que sacrificarse en
el último atraco para que su hijo viva y enderece su rumbo. Oliver está abatido
pero Diggs le hace ver que lo que pasó no es su culpa y su padre estaría
orgulloso de lo que ha hecho. Parece que la serie va a jugar muchas cartas
escondidas y lo que parecía una historia de venganza inicial va a generar la creación
del héroe de Starling City. Como Queen debe aprender la lección se acerca de
nuevo a su madre, enfadada con él por sus continuados desplantes, con una cena
de batidos y hamburguesas. Veremos cómo continua el asunto en un capítulo de
claros y oscuros pero que abre nuevas y más posibilidades.
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