The Walking Dead (3x01) Seed: Plantar una nueva semilla

La cuenta atrás ha finalizado y la tercera temporada de “The Walking Dead” ha llegado para sembrar una semilla en nuestros televisores. Si la primera temporada se quedó demasiado corta produciendo un desatino de irregularidad, la segunda comenzó con el ritmo lánguido de un caminante… Parecía que todo estaba perdido y listo para ser enterrado… No se sabe si el ‘despido’ de Frank Darabont o la ruptura de la temporada en dos grupos de capítulos provocaron el resurgir de la serie basada en los cómics de Robert Kirkman. La recta final fue notable y junto con el piloto lo mejor que ha deparado esta exitosa ficción de género… Y es que el éxito de “The Walking Dead” es tan brutal e internacional que la moda zombie está más podrida que nunca. ¡Todo ha sido zombificado! No es de extrañar que un grupo de amigos se haya reunido para escribir una antología de doce relatos de temática zombi y atreverse a publicarla mediante una editorial online con el título de ‘Recién Muertos’. Desde este bastardo blog apoyamos este tipo de iniciativas aunque ahora sea el momento de hincar el diente a “Seed”, primer capítulo de la tercera temporada de “The Walking Dead”, y confirmar si estamos ante la semilla sobre la que debería florecer uno de las flores más sangrientas de la pequeña pantalla.

Aparte de no tener competencia, “The Walking Dead”, guste o no, esté nominada o no a los Emmys, tiene un público que conforma una horda que se extiende por todo el planeta. La AMC ha encontrado la fórmula del éxito y los mejores maquilladores protésicos del planeta un campo de pruebas para deslumbrarnos con su originalidad y talento. Los zombis aquí son los auténticos protagonistas y reflejos de los únicos seres vivos que han sobrevivido a la Apocalipsis vírica. Lo que queda de los Greene y los Grimes al completo siguen unidos al destino de Glenn, Carol, T-Dog y Daryl… mientras que Andrea continúa su camino en paralelo junto con Michonne. Los dos grandes inconvenientes de esta temporada van a ser jugar con el material original de Robert Kirkman y la copiosa información revelada en el trailer y teasers que han mostrado giros y cambios evitando sorpresas…

La labor de la tercera temporada, no obstante, es plantar la semilla definitiva como primera gran temporada de “The Walking Dead” debido, sobre todo, al aumento de capítulos. De nuevo se repite la ‘estrategia’ de lanzar los primeros ocho capítulos y esperar a febrero a liquidar nuestros nervios y entrañas. Glen Mazzara es el nuevo amo y tiene claro lo que público pide a esta serie: dosis de acción, suspense, violencia y pura supervivencia. El cambio de los títulos de crédito refuerza la teoría de que estamos ante un nuevo nacimiento. “Seed” no se anda con rodeos y nos sitúa mediante una elipsis en los intentos de resistencia y conservación del grupo liderado por Rick. El embarazo de Lori está ya muy avanzado y queda poco para que dé a luz. Sorprende la utilización del silencio para guiarnos en el arranque de un arma grupal y muda… hasta que el líder por fin habla. Por no faltar, no falta hasta canción e inclusión musical más adelante. El carrusel de emociones está servido pero lo que nos interesa es conocer que el grupo lleva todo el invierno esquivando a hordas y montones de caminantes, mientras intentan conseguir alimentos en casas… El búho también está en el menú. Carl Grimes es uno más del grupo aunque pareciera que fuera ayer cuando sentía pavor por los caminantes. Los miembros más débiles tienen también un rol… Madurar o morir, parece la clave… y también perdonar o sobrevivir. La tirantez entre Rick y Lori es visible y la muerte de Shane abrió en canal viejas heridas… Lori también afirma que su hijo ya no la soporta… ¿Se acabó el retrato infantil familiar que tanto se utilizaba para menospreciar a la serie? Llegaron hordas de muertos y caminantes por doquier y dosis de violencia explícita que nunca ha tenido una serie emitida por televisión…

La otra familia, los Greene, ha quedado mutilada por la infección y levantamiento de los muertos. Únicamente han sobrevivido las hermanas Maggie y Beth y el patriarca Hershel. Como si los propios guionistas esta vez conocieran de antemano la imposibilidad de dilatar la conocida sorpresa por cuasi-todos los televidentes han decidido presentarnos la prisión… y lo que debería ser el nuevo hogar de los protagonistas de la serie. Disponer de armas, comida, medicamentos y un lugar seguro sería su salvación física y mental. El problema es que tienen que limpiar el exterior vallado en una gran y alargada secuencia en la que presenciamos los métodos directos que tiene el grupo para liquidar a varias decenas de caminantes. Con todo resuelto pueden pasar la noche en el exterior mientras Rick da vueltas a la valla que rodea la prisión en el sentido corporal e íntimo, maquinando los planes para salvar a su grupo. Deben acceder al interior… y lo deben hacer ya…

Nos queda conocer más del otro contraplano y punto de vista. Mientras que Andrea está enferma por una fuerte gripe-resfriado-catarro-o-lo-que-sea, Michonne ha buscado medicamentos. El problema de las hordas es el pan putrefacto de cada día y deben volver a viajar… aunque Andrea siga convaleciente. De nuevo aquí todo queda aparcado para el encuentro que veremos en breve con El Gobernador tan cacareado en los avances… Mientras tanto lo importante es la toma del interior de la prisión y el primer bloque de celdas donde se alojan. Uno de los momentos más descacharrantes está propiciado por guardias de la prisión zombificados vestidos con sus uniformes antidisturbios… Con la toma de la prisión realizada, pasamos al estado de salud de Lori y su futuro hijo. Lori ha dejado de notar los movimientos del feto y así se lo hace saber a Hershel… Lori teme que su hijo esté muerto e infectado, que desde su interior la desgarre y la devore viva… También piensa que si está vivo ella morirá durante el parto. Observamos también que Carl ha ‘crecido’… y se siente incómodo cuando Hershel entre la celda donde se encontraban él y su hija.

A la mañana siguiente deciden investigar el resto de la prisión para encontrar la cafetería y la enfermería. La misión se complica al aparecer caminantes y separase Glenn y Maggie. Hershel es atacado por un caminante que parecía ‘muerto’ pero se reanima al oler su sangre y le arranca medio tobillo de un bocado. El grupo de reúne y lleva corriendo a Hershel a la cafetería donde los caminantes les siguen y consiguen eludir al bloquear la puerta. Rick hace un torniquete y a hachazos, en una escena brutal, amputa la pierna del patriarca por encima de la rodilla hasta que éste se desmaya para evitar la infección… Para colmo, Daryl se da cuenta de que no están solos… y emergen unas sombras de entre las rejas que comunican la sala con la cocina… ¡No están solos! Y… ¡no están muertos! HOLY SHIT!